domingo, 28 de septiembre de 2008

En compañía de los Libros

Los dos talleres juntos. Muchos Color.
Encuentro previo a la exposición de los poemas.


Saludos y besos a todos.

domingo, 7 de septiembre de 2008

TALLER LITERARIO ADULTOS


Poema
Consigna: Elaborar un "poema piramidal"; el primer verso estará formado por una palabra; el décimo tendrá diez palabras.

Poemas
latidos murmurados
fugaces instantes compartidos
caricias auditivas, recuerdos olorosos
volátil alma, desprendido anhelo compartido
zigzagueante música, inquieto ritmo, sonora cadencia
arcones de vivencias añoradas, confusos recuerdos mágicos
lectura sabrosa, escucha atenta, aromas transmitidos, piel sedienta.
Seis mujeres, una mesa. Cita semanal. Sosegado encuentro espiritual.
Aletargados versos escapando vergonzosos de invisibles barrotes de una celda.
Haydeé Díaz
Plenilunio de invierno

Luna que te derramas sobre las manos desnudas de los árboles
sobre las calles silenciosas
y lloras sobre los zapatos apurados de un caminante.
Brilla, luna embrujo de poetas y de gatos
lágrima luminosa del cielo que caes y caes
con tu andar errático.
Brilla en las ventanas dormidas
en los espejos
sobre los techos de los vivos
y sobre las tumbas de los muertos.
Moja las fantasmales cortezas de los árboles,
te sostienen los cipreses y el lago para que no te canses de caer
lágrima que fluyes hacia la tierra desde la eternidad
la misma que miraron Cristo y Buda
y el esclavo y el sacerdote y el señor feudal.
Con tu luz fueron bautizados los juramentos de los amantes.
Lágrima que giras y caes en un cielo cárdeno,
a veces te sostengo entre mis manos;
detrás del cristal bebo tu lágrima que brilla blanca.
Llora antigua lágrima de plata
que luego irás a la orilla de otro mar.

Elena Mettler (Toti)

Consigna: Escribir un poema a partir del epígrafe: “El sembrador es el que siembra la palabra”

Granos de oro

Poeta que siembras
deja que tu canto
caiga a la tierra
y suba hasta el cielo,
como flor turgente como fragante hierba.
Incendia la agonía,
desnuda la abundancia,
transforma la aridez de los surcos.
Fecunda palabras
para que germinen como granos de oro.

Emerice Lonardi

Consigna: Elaborar haikus, de acuerdo con los lineamientos vistos en el taller.

I

Luna poniente
montaña adormecida
grillo que canta.

II

Árboles ciegos
tierra agita y ondula
perfumes frescos.

III

Cielo encendido
en el verde horizonte
pétalos de sol.

IV
Suave y tibio viento
puebla sueños fantasmas
duerme aquí mi sombra.

Emerice Lonardi

Consigna: Elaborar un texto poético a partir de una imagen dada.

Arrobamiento

He visto colores celestes,
pero ningunocomo el de tus ojos,
pequeña.
He visto
otras rondas, otras danzas,
otros seres,pero nada hallé
comparable a la gracia
de tus movimientos:
nada que se parezca
al ángel rosa
que te cuida,
chiquilla inquieta.
Tuve ante mí
la insinuación purísima
de mar, de luz, de cielo,
más, no vi allí
ni el misterio,
ni la profundidad
que me regala
tu mirada inocente.

¡Mírame otra vez!
¡Sonríe pequeña!
Vamos a mostrarles
a todos los pintores y poetas
la maravilla de tus ojos celestes…
¡Y verás
que con ellos no pueden!

Nidia Della Giustina de F.

Almafuego

Entibian mi aliento las palabras.
Descansan los ojos ante el viento
que desprenden las miradas.
Se resquebrajan maderos insaciables,
resurgen las aves del silencio
y un quejido lento desdibuja
un manantial de luces y deseos.
Conquisto una sombra que me dobla
y refleja mi paso en el sendero,
atizo las brasas y al instante
crepúsculos abrigan otro fuego.
Navego sin rumbo por el ocre
y maldigo la espera del mensaje.
El tiempo se escurre lentamente
como un pabilo sediento, sin aire.
Coraza que quema y se defiende,
alma viva, ardiente en el encuentro,
imagen fulgurante de un pasado
que abriga nostalgias en su pecho.
Soy hija a veces de esa llama
que borra y crea un universo,
la encuentro en el latir de mi garganta
y enciende la vida entre mis dedos.


La tarde sin luz

Mirar lento.
Se encuentra callada
la tarde sin luz.

Vuela la brisa en silencio,
conmueve las cuerdas
de algún instrumento
que busca latidos bajo sus alas.

Un cuerpo se hace eco
de un sonido lejano,
los brazos elevan el alma
cubiertos de puro sudor
que lava el corazón herido
y ahoga los ojos.


La espera

Perdido momento
el ayer.
Descubrió el rostro de quien
rumbo a la vida
casi sin destino,
atravesó su primavera.
Luz que caminaba
cuando la luna sufría.
La vida miraba
con tres inocencias.
Pasado ruidoso.
Futuro cercano.
Arriba…
la espera.


En busca del vuelo

Suelto el amarre
entre aguas tibias,
caricias de espuma
llegan…
me mueven
y mecen mi luz
y mi tiempo.
Brota una isla
desierta, sin miedo,
callada de hambre
de lluvia…
Y el silencio la estremece
en busca del vuelo.
El ritmo señala
la marcha…
lenta.
Vibra un retoño
dormido
y despierta.
Sus brazos suben
y florecen.


Analía Viviana Duarte

Rumbo incierto

Perdido en un sin fin de preguntas
en un ayer que se escapa hacia el mañana
sin reconocerse quién es hoy
con la eterna y cavilosa certidumbre de la balanza.

Rumbo incierto que lo devora febrilmente
sin dar tregua a su cansancio humano
y no lo deja disfrutar su primavera.

Que caminaba solo se dio cuenta
cuando volvió la intriga a su cabeza
y ya nadie lo miraba.

Ir de a dos, eso es lo que quiere
¿Para qué un inmeso mar
si un pez debe nadar solo?

Aguas arriba, contra la corriente...las respuestas.

Haydeé Díaz